¿Por qué huele mal el aire acondicionado?

¿Por qué huele mal el aire acondicionado? Si te has hecho alguna vez esta pregunta, es porque has sufrido este hecho en tu hogar y sientes que el aparato “apesta” nada más encenderlo. Pero no te preocupes, aquí te vamos a contarte porqué pasa esto y la forma de evitarlo.

¿De dónde procede el mal olor del aire acondicionado?

Primeramente, tenemos que tener en cuenta que el aire acondicionado es una máquina, cuyo funcionamiento consiste en aspirar o absorber el aire de la estancia a climatizar. Por lo que, si en el área donde actúa el aparato hay malos olores, la unidad de aire acondicionado lo moverá por todos los lugares donde se impulse ese aire.

¿Sorprendido? Pues deberías saber que la máquina de aire acondicionado por sí misma no produce el mal olor, sino que procede del aire circulante, aunque nos dé la sensación de que se trata de nuestro aparato de climatización.

Motivos por los que huele mal el aire acondicionado

El aire acondicionado puede llegar a oler fatal, pero ese olor, salvo en casos raros y concretos, nunca procede de la máquina, sino por otros factores que terminan incidiendo en la máquina. Algunos de estos factores que producen el mal olor son:

Filtros sucios

Los filtros de aire acondicionado son de aquellas cosas en las que hay que realizar un mantenimiento periódico que resulta muy sencillo. Esto es importante ya que la limpieza y mantenimiento de los filtros nos ayudará a mantener el climatizador en buenas condiciones y evitar futuras averías, reducir el consumo energético, terminar con los olores y aumentar la vida útil del aparato.

Ventilador e intercambiador de frío sucios

Dos de los espacios (o piezas) que se ensucian mucho, en este caso, son el intercambiador de frío y el ventilador interior. En estos lugares, la humedad producida por el modo frío hace que se produzca una pasta húmeda donde pueden aparecer y proliferar bacterias y hongos. Estos microorganismos también son culpables que aparezcan malos olores en la máquina.

Aunque creamos que, al ponerlo a funcionar durante un rato, el olor se va a ir, no es así. Lo que se produce es que el aire, al enfriarse y producir gotas de agua, crea una barrera protectora que evita que podamos sentir el olor, pero una vez que apaguemos el aparato, volverá a aparecer.

Desagüe

Dentro de la zona de desagüe podemos encontrar diferentes problemas que conllevan la aparición de mal olor:

• Desagüe de la unidad interior. Todas las unidades de aire acondicionado tienen un desagüe, ya que condensan la humedad al producir frío y esto genera agua que ha de ser expulsada.
• Aspirar el olor de otro desagüe. Si la opción para desaguar es mediante un tubo al exterior, no habrá problemas de olores; pero si hemos conectado el tubo a un desagüe de la vivienda y este tiene problemas de malos olores, el olor viajará de este desagüe al aparato.
• No hay suficiente pendiente en el desagüe. Otro fallo que suele estar relacionado con la instalación o el diseño del desagüe. No existe suficiente pendiente para que la humedad y la suciedad fluyan, obstruyendo el tubo y provocando malos olores.

Otras posibles causas del por qué huele mal el aire acondicionado

Los casos anteriores son los más habituales cuando se producen olores en el aire acondicionado, aunque existen otros factores. Estos son menos comunes, pero también pueden producir malos olores.

• Olores que viajan desde la pared de la vivienda hasta el interior debido al mal sellado del agujero y el aislante de la cámara.
• La unidad interior (conductos) aspira el aire del falso techo y existe una fuga en el desagüe de la vivienda.
• Las gomas o plásticos de la unidad interior contienen olores de fábrica.
• Ambientadores en el interior del aire acondicionado.
• La unidad aspira el aire del falso techo de la casa del vecino.

Recomendaciones para acabar con el mal olor del aire acondicinado

Si experimentamos olores desagradables provenientes del sistema de climatización, existen medidas que podemos implementar para suprimirlas y, además, evitar que ocurran.

Mantén los filtros limpios

En numerosas situaciones, la raíz del problema radica en los filtros contaminados del sistema de climatización, lo cual provoca la acumulación de bacterias y mohos. Esto también disminuye la eficacia y el flujo de aire del dispositivo. Un simple aseo anual es suficiente para mantener los filtros en óptimas condiciones.

Realiza una limpieza interna del dispositivo

Si el olor desagradable permanece en la vivienda, la limpieza del sistema de climatización deberá ser más exhaustiva. Además de la limpieza superficial, será esencial eliminar toda la suciedad interna. Hay productos desinfectantes disponibles para este propósito.

Desagüe interno

Todos los modelos de sistemas de climatización expulsan agua debido a la condensación de la humedad presente en ellos. Durante la instalación, la humedad condensada puede ser dirigida hacia el exterior o hacia un drenaje interno.

Bandeja de condensación

El aroma desagradable puede originarse en la bandeja. Al retirar los filtros del dispositivo, podemos observar unas láminas metálicas (bandeja de condensación de agua) que recogen el agua que se condensa en la batería, lo cual puede generar olores desagradables en el equipo debido a la formación de bacterias y mohos. Lo recomendable es limpiarla anualmente con desinfectante y alguicida.

Evita generar olores en el ambiente

El aire que el dispositivo absorbe proviene del ambiente, así que si este está contaminado con algún tipo de olor, acabará dispersándose por toda la habitación. Es aconsejable abstenerse de fumar en lugares con un sistema de refrigeración o instalar un sistema de extracción si el sistema de climatización se encuentra en la cocina.

Activa el sistema ocasionalmente

No utilizar el sistema de climatización puede resultar en la acumulación de suciedad y, finalmente, en un olor desagradable. Encenderlo unos minutos al mes cuando no esté en uso, evitará el problema de los olores.

Como puedes observar, eliminar los olores desagradables de nuestro sistema de climatización es una tarea sencilla. Un adecuado aseo y mantenimiento garantizará que nuestro entorno huela fresco y que nuestro dispositivo tenga una mayor durabilidad.